Muchas personas aún no están familiarizadas con esta palabra: “Perimenopausia o climaterio”. Para aclarar este término, digamos que la menopausia es el punto final de la vida reproductiva de la mujer.
Al igual que al inicio de la pubertad, cuando las personas jóvenes atraviesan cambios para llegar a la edad adulta, una mujer sufre una serie de cambios, durante el llamado periodo climatérico —que ve una transición en su estado físico y fisiológico—, lo que lleva a un declive hormonal de la función ovárica activa, que en última instancia termina en el cese de la fertilidad (menopausia). Por lo tanto, la menopausia ocurre dentro del período climatérico y está intrínsecamente ligada a éste. Incluso puedes referirte al climaterio como perimenopausia o la secuencia de eventos que conducen a la menopausia.
¿Qué es el climaterio? ¿Cuándo ocurre?
El climaterio ocurre entre los 40 y 50 años y puede durar de 15 a 20 años, mientras que la menopausia puede tardar de 1 a 7 años en completarse y ocurre alrededor de los 45 a 55 años de edad.
El climaterio abarca las alteraciones emocionales, psíquicas y físicas que sufre una mujer durante su etapa sexual posterior.
El fin del período climatérico en la menopausia no es un fenómeno rápido, sino que se produce gradualmente. Una mujer puede tardar varios años en llegar a la meta. Durante la perimenopausia, las mujeres experimentan múltiples alteraciones, incluyendo cambios en la frecuencia de los ciclos menstruales, tanto acortamiento de ciclos como meses sin regla, el aumento de peso y mayor cantidad de acúmulo de grasa a nivel del abdomen, bochornos o aumento de la temperatura corporal, sudores nocturnos y cambios de humor. Muchas de estas condiciones cambiantes pueden sorprenderte.
Hay otros síntomas notables: piel apagada y fina, con mayor sequedad y más necesidad de hidratación, dificultades para dormir, el cabello puede volverse más delgado y aumentar la pérdida. Hay una disminución de la testosterona, hormona que libera la mujer cuando su Ovario está funcionando que ocasiona un aumento del vello corporal y facial. La base de estos cambios son los niveles hormonales fluctuantes que disminuyen a niveles casi insignificantes, que sugieren la llegada de la menopausia. Se observan irregularidades en el ciclo menstrual de la mujer con períodos menstruales más cortos y largos, más ligeros y pesados, hasta que cesa.
Se ha demostrado que durante el período climatérico los síntomas depresivos son altos y podrían estar relacionados con la gravedad de los síntomas de la menopausia.
Cambios hormonales en la perimenopausia
Debes tener en cuenta que, durante el período climatérico, uno de los cambios más comunes es el nivel de las hormonas sexuales femeninas: el estrógeno y la progesterona, que descienden a su nivel más bajo y, en última instancia, dejan de funcionar al llegar a la menopausia. Dado que los ovarios dejan de funcionar, detienen la producción de estrógeno, impidiendo así la ovulación, así como la producción de progesterona. Aunque, una cantidad limitada de estrógeno todavía se produce a partir de las células grasas y las glándulas suprarrenales, pero no son suficientes para inducir sus efectos. Esta hormona se llama estrona. La mujer con mas peso tendrá por ello niveles de estrógenos más elevados y menos sofocos que aquellas con bajo peso, pero estos estrógenos pueden producir enfermedades uterinas en el caso de obesidad. Durante este tiempo es importante que prestes atención a los síntomas cambiantes a medida que pasas por el período climatérico.
¿Se puede inducir el climaterio?
Sí, el climaterio se puede inducir temprano si se extirpan los ovarios mediante ooforectomia o histerectomia con extirpación de ovarios. También puede ocurrir si la mujer sufre daños en sus ovarios debido a la quimioterapia, la radiación o el uso de drogas como el tabaquismo. En aquellas mujeres muy fumadoras, la menopausia puede adelantarse.
Hay una aparición abrupta de problemas relacionados con el climaterio si esto ocurre y ella se vuelve inmediatamente menopáusica. Este período climatérico inducido puede ser más difícil de experimentar y presentan más efectos adversos para una mujer en comparación con las etapas transitorias graduales que conducen a la menopausia.

Síntomas del período climaterio y la menopausia
Algunas veces, el período climatérico puede ir seguido de ciertos síntomas agravantes, los cuales incluyen trastornos del sueño, sofocos, fatiga general, sudores nocturnos, incontinencia urinaria, relaciones sexuales dolorosas, depresión, hipertensión arterial, aumento de la urgencia o de la frecuencia urinaria y palpitaciones.
Los síntomas más comunes que se observan en la menopausia son: adelgazamiento del cabello, cambio en la forma de los senos o su reafirmación, reducción del moco cervical normal, pérdida del tono muscular y adelgazamiento de la pared vaginal, disminución del ritmo metabólico, aumento de la osteoporosis, redistribución de la grasa corporal, pérdida del tono del esfínter rectal y de los músculos de la vejiga, atrofia de la vagina, el útero y el cuello del útero, pérdida del tono de la piel y de las arrugas.
Aunque una mujer tiene que pasar por muchas dificultades, tanto durante el climaterio como en la menopausia, hay que tener en cuenta que ninguna de ellas es una amenaza para su salud que necesite ser corregida. De hecho, ambos procesos están intrínsecamente asociados con la fase normal de maduración de la mujer. El período climatérico puede considerarse como el inicio de una nueva fase de la vida con nuevas oportunidades para redefinirse.
Tratamientos para mejorar los síntomas de la perimenopausia
Tratamientos Naturales
Cada vez más se utiliza tratamiento con hormonas bio identicas, tratamiento novedoso que adapta a cada mujer a sus necesidades.
A menudo se prescribe terapia de reemplazo hormonal (TRH) para reabastecer al cuerpo con las hormonas que ya no produce, te recomendamos pedir la opinión de tu médico especialista. Al igual que con cualquier medicamento, existen riesgos y beneficios, y cada mujer debe decidir si la TRH es la opción correcta para ella. La TRH típicamente consiste en un suplemento de estrógeno/progesterona, o solo la administr de estrógenos en aquellas mujeres que no tienen utero por una histerectomia. Esta medicación generalmente se administra por vía oral o a través de un parche o gel para la piel. El estrógeno es el componente que trata los sofocos, la sequedad vaginal y la osteoporosis (adelgazamiento de los huesos). Aplicar estrógeno puede aumentar el riesgo de cáncer endometrial o uterino, ya que estimula el crecimiento celular, pero la progesterona contrarresta ese riesgo.
Sin embargo, tanto la progesterona como el estrógeno tienen efectos secundarios negativos como sangrado irregular, dolores de cabeza, hinchazón y dolor en las mamas. El estrógeno se puede usar sólo en mujeres que han tenido una histerectomía.
Recientemente, las investigaciones sobre la TRH revelaron algunos hallazgos controvertidos: Los ataques cardíacos, apoplejías, coágulos sanguíneos y cáncer de mama ocurrieron con mayor frecuencia en mujeres que tomaban TRH combinada. Tomar estrógeno solo aumentó ligeramente el riesgo de apoplejía y coágulos sanguíneos y no pareció aumentar o disminuir el riesgo de enfermedad cardiaca. No se encontró un aumento significativo en el riesgo de cáncer de mama para mujeres en terapia de estrógeno solo ni terapia combinada, pero si aumenta algo el riesgo, por lo que estaría contraindicada en mujeres con antecedentes de cáncer de mama o con cáncer de mama previo. La combinación y la TRH sólo de estrógeno siguen siendo terapias efectivas para aliviar los síntomas menopáusicos como los sofocos. Aunque no es apropiado para todas las personas, estos tratamientos pueden tener su lugar para algunas mujeres que se enfrentan a la menopausia o a problemas relacionados con ésta, y que no ceden con otras terapias.
Tratamientos Alternativos
Como tratamiento alternativo para los síntomas de la vagina, el médico puede recetar una crema vaginal de estrógeno para ayudar a detener el adelgazamiento de los tejidos vaginales y mejorar la lubricación. También determinadas hidratantes con his luto Ivo, aceite de centella… usado de forma crónica, puede mejorar.
La alimentación también puede ayudar a reducir los síntomas:
- Comer alimentos ricos en estrógenos vegetales, como soja y leche de soja. Algunas investigaciones sugieren que la soja puede aliviar síntomas como los sofocos. Los frutos secos y las semillas, el hinojo, el apio, el perejil y el aceite de linaza también pueden ayudar.
- Aumentar el consumo de calcio, de 1,000 a 1,500 mg al día, y hacer ejercicio regular con pesas para evitar la osteoporosis y mantener una buena salud general. Bajar el alcohol y dietas hipercaloricas.
Es importante entender que hay poca evidencia científica con respecto a la efectividad de estos tratamientos alternativos.
Por esta razón, es importante que acudas regularmente con tu médico. Si lo deseas, puedes hacer una cita con nosotros para ofrecerte la atención necesaria sobre tu salud.