La menopausia es una etapa (que no enfermedad) en el ciclo de la mujer que puede generar sintomatología a veces incapacitante como pueden ser los sofocos, migrañas, insomnio, dolor articular, osteoporosis, menos fuerza física, acné…
En muchas ocasiones normalizamos todos estos síntomas pero existen muchas formas de mejorarlos; aquí te dejo unos pequeños consejos:
-Hidrátate (tomar dos litros de agua por persona es un mito, algo que te puede ayudar a guiarte es fijarte en el color de la orina, si está oscura es que tienes que aumentar la ingesta), evita tóxicos como el tabaco o el alcohol, igualmente cuidado con el exceso de cafeína.
-Mantén tus huesos sanos, en esta etapa tenemos más probabilidad de sufrir osteoporosis: cuida el aporte de calcio, pero algo aún más importante todavía que el calcio es tener unos buenos niveles de Vitamina D; la mayor parte de la población de esta zona sufre carencia de esta vitamina y si no tenemos un buen estatus, la absorción de calcio se verá disminuida. Es importante valorar sus niveles en analíticas y adaptar la alimentación y la suplementación si fuera necesaria. Asegúrate de tener un buen aporte de magnesio, actualmente los suelos están empobrecidos en este elemento y por tanto los alimentos igual. La Vitamina K2 juega un papel importante en este caso, ya que ayuda a la absorción del calcio en los huesos, y que no se deposite en forma de calcificaciones en otras zonas del cuerpo.
-Asegúrate de llegar a los requerimientos proteicos, algo que también se puede aumentar consumiendo legumbres, frutos secos… te van a aportar mucho valor nutricional, fibra y saciedad.
-Otro dato importante es evitar las bebidas carbonatadas, ya que contienen muchos fosfatos y también interfieren en la absorción del calcio. Recuerda que no somos lo que comemos, si no, lo que absorbemos. Otro nutriente importante en esta etapa es el zinc, el cual podemos encontrar en las pipas de calabaza.
Y por supuesto, muévete, adapta una rutina de ejercicio a tus horarios.
También podemos valorar suplementación como lúpulo, salvia o isoflavonas para aliviar tus sofocos.
Recuerda la importancia de individualizar todo esto a tu sintomatología y tu caso en concreto, los nutricionistas te pueden ayudar mucho en este tema.
No te conformes, si crees que ha llegado el momento de empezar a encontrarte bien, pídenos ayuda.
Natalia de la Rosa. Nutricionista de HM IMI Toledo